Don César Centeno retira con cuidado de la caja de cartón las figuras de barro envueltos en papel. De a poco las coloca sobre el tablón para que formen parte los juegos de pesebre que exhibe este año en la tradicional expo de Areguá.
Cada creación de su autoría, para la representación del nacimiento del niño Jesús, tiene identidad paraguaya; los integrantes visten atuendos típicos como el sombrero piri, ao po’i o la faja tricolor. De fondo, las serranías y la flora de especies nativas se plasman en un cuadro.
La familia Centeno se destaca por las obras originales hechas de barro.
En el puesto de don Enrique Centeno este año la novedad son los pesebres cuyas figuras presentan rasgos de orientales. “Es un homenaje a los inmigrantes del país”, detalla don Enrique.
En otro puesto, un poco más adelante, otra de las famosas creaciones es la de don José Javier Chito Centeno cuya especialidad son las figuras en tamaño real, sobre todo la sagrada familia representada por indígenas y animales autóctonos del Chaco, que cada año es motivo de admiración por parte de los visitantes.
Estas son solo algunas de las novedades que se pueden encontrar en la tradicional Expo Pesebre de Areguá. Este 2021 se presentan cerca de 130 expositores en el paseo de la Avenida Mariscal Estigarribia donde el despliegue de arte y color se imponen cada año.
La atención es desde la mañana y se extiende hasta las 22:00 horas, aproximadamente. La feria será hasta el 23 de diciembre. Los juegos de pesebres pequeños pueden ser adquiridos desde G. 30.000 y los medianos desde G. 100.000 a G. 150.000. Generalmente están compuestos por 17 piezas. Los tamaños reales tienen un costo entre G. 5.000.000 a G. 7.000.000, aproximadamente
decoraciones. Otras pintorescas propuestas son las variedades de planteras, plantas, tejas pintadas y adornos colgantes de cerámica, para exteriores. También se presentan las tradicionales figuras de santos.
“Con la llegada de la pandemia aumentó la demanda de adornos de pared. Entonces la producción está más enfocada en eso porque es lo que da de comer de manera permanente. Se desvió un poco la producción de pesebre, que antes ya iniciaba desde el mes de enero. Ahora recién desde octubre”, relató Margarita Céspedes, artesana y comerciante.
Por otro lado, Susana López, integrante del comité de Alfareros Unidos, señaló que la idea es lograr implementar en las escuelas el uso del barro en reemplazo de la plastilina y con ello fomentar la artesanía cuya actividad es una de las principales en el distrito.