Policías y antimotines están apostados en las entradas de Masaya, 35 km al sur de Managua, haciendo temer una violenta incursión antes de que el Gobierno celebre el repliegue, una caravana encabezada por Ortega, quien anualmente llega a esta ciudad para recordar una gesta de la revolución de 1979.
En las últimas semanas el Gobierno intensificó la llamada operación limpieza de fuerzas combinadas para derribar las barricadas de adoquines que levantaron los manifestantes en las vías.
En Monimbó, los habitantes reforzaron las barricadas ante la amenaza de ataque de las fuerzas gubernamentales.
La Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (Anpdh) denunció la existencia de al menos dos fosas comunes en el departamento de Carazo (costa pacífica) en las que simpatizantes del Gobierno de Daniel Ortega han ocultado cadáveres de ciudadanos asesinados durante las protestas contra el mandatario.
Al ser preguntado sobre el caso, Leiva especificó que las dos fosas se encuentran junto a los estadios de Jinotepe, cabecera departamental, y de Diriamba. AFP-EFE