Una novedosa y peculiar atracción constituye el Santuario de los Loros, un parque cubierto de enormes y frondosos eucaliptos en un predio de una hectárea, situado en el centro mismo de la ciudad. En lo alto de los añosos árboles se encuentra una gran cantidad de nidos de loritos que casi en todo momento del día cotorrean, convirtiendo al entorno natural en un ambiente único y relajante. El parque está totalmente despejado y limpio entre el eucaliptal, por lo que se puede ingresar sin problemas a su interior de manera gratuita.
Es impresionante y cautivador escuchar el cantar al unísono de estas aves, repartidas en las copas de los árboles del lugar.
“Yo sola o a veces con mi marido, solemos matear temprano y es espectacular el cantar de estas aves, produciendo un ambiente de relax y regocijo total”, dice Dora de Peralta, vecina del sitio.
Muchas de las especies de loros o cotorras están en peligro de extinción y en la zona de Colonias Unidas, con la desaparición de zonas boscosas son pocos los lugares en los que se ven a estas aves.
Dentro del plan de expansión del turismo en Obligado, la Comuna local acondicionó y hermoseó el puerto local, donde se ofrece una playa a orillas del Paraná con un amplio quincho central –y más de cinco quinchos pequeños–, cantina, canchas de vóley y fútbol en medio de un paisaje paradisiaco rodeado de árboles y pájaros.
En una estratégica zona, el visitante podrá conocer sobre la cultura e historia del lugar, ya que allí se encuentra una antigua casa donde –según cuentan– pasaba sus veranos el otrora dictador Alfredo Stroessner. También resalta la casa de ramos generales Müller, que es la primera en su género en la región.
El puerto se encuentra a 12 kilómetros de la ruta PY06 en la parte que cruza por Obligado, tramo totalmente asfaltado y a 52 km de Encarnación. En el puerto, el acceso es de G. 5.000, por persona, y todo lo recaudado se invierte en el lugar. NM