La mujer ordenó el crimen de su pareja a través de la deep web, una zona fuera de control a la que solo una reducida parte de usuarios tiene acceso, según la investigación que tuvo inicio en marzo, cuando se detectó en el sitio un mensaje con el encargo para cometer el homicidio de su novio, un oficial de Policía. El hecho nunca llegó a producirse.
Tras localizar al policía e interrogarlo, analizando las fotografías, las pistas llevaron a las fuerzas de seguridad a Dinamarca, donde fue detenida la mujer.
“Ella siempre ha defendido su inocencia y durante el juicio ha apuntado a un hombre llamado Luc, quien le dijo que comprara bitcoins. Según ella, él pudo ser responsable de haber encargado el crimen. Sin embargo, el tribunal no ha considerado creíble su versión, ante su falta de información sobre el paradero de ese supuesto amigo”, publicó El País de España.