Los chilenos eligen presidente este domingo con una ex ministra de Trabajo comunista y un abogado ultraderechista como favoritos, preocupados sobre todo por la seguridad y la migración irregular, dos temas que le dieron impulso a la derecha.
Jeannette Jara, del Partido Comunista y representante de una coalición de centro-izquierda, y el ultraderechista José Antonio Kast, que vincula el crimen a los migrantes indocumentados y propone un plan para expulsarlos, encabezan los sondeos que proyectan casi seguramente una segunda vuelta el 14 de diciembre.
Ambos han enfocado su campaña en el combate a la delincuencia y la migración irregular. En Chile viven unos 337.000 extranjeros indocumentados, la mayoría venezolanos, según cifras oficiales. “Lo que yo espero de un próximo presidente es más mano dura”, dice Hernán González, de 28 años, que trabaja en un centro de rehabilitación juvenil en Iquique, 1.800 km al norte de Santiago.
En esta ciudad, puerta de entrada de la migración ilegal a Chile, “hay un enjambre de personas, mayoritariamente indocumentadas, que están generando tráfico, delincuencia y consumo” de droga entre los jóvenes, agrega.
El aumento de los homicidios, que se triplicaron en la última década, de los robos con violencia conocidos como “turbazos” y del secuestro extorsivo dispararon el temor de los ciudadanos. Los sondeos anticipan que Jara vencería en primera vuelta entre los ocho candidatos en competencia. Pero Kast, un abogado conservador de 59 años se adjudicaría el probable balotaje, según analistas. AFP