Me llamo César Almirón Escobar, tengo 21 años y soy de la ciudad de Tebicuary, del Departamento de Guairá. Estoy entrenando hace casi dos años y medio ya, vine en el 2021 y hasta ahora le estoy metiendo con todo.
Mi amor por el deporte nació cuando tenía 12 años, inicié en la escuela de fútbol que se abrió en mi pueblo, en Tebicuary. La fábrica Azpa llevó entrenadores de buen nivel y empecé con ellos hasta los 15, 16, luego vine al club Libertad. El que me enseñó a correr es un señor que vive cerca de mi casa, se llama Nelson Esteche. Él me dio muchos consejos y me dijo que algún día iba a ser grande en esto. Eso a mí me gustó, me motivó y empecé desde abajo, estoy luchando hasta ahora.
Cuando tenía 16 años empecé en las inferiores de Libertad. Luego me fui a Guaireña cuando estaba en la Intermedia, después de ahí viajé a Bolivia y de Bolivia vine a la Sub 19 de Villarrica cuando subió a Primera División. Ese fue mi último club donde jugué al fútbol y después ya me dediqué al atletismo.
Para dejar el fútbol le hablé a mi papá y me dijo si es que yo dejaba igual me iba a apoyar. Eso me motivó también para seguir esta disciplina. Lastimosamente, no me salió nada en el fútbol, y cambié de deporte. Ahora estoy logrando muchas cosas acá.
Ya llegué a un Mundial de mayores el año pasado en Estados Unidos. Este año tengo el Sudamericano de mayores que se va a hacer en São Paulo el mes que viene y tengo el Panamericano de mayores en Chile que se va a hacer en octubre.
La verdad que me estoy preparando para eso, me estoy dedicando bien, le estoy metiendo con todo mi tiempo para representarle bien a mi país porque eso es lo que más quiero hacer.
Cuando jugaba fútbol era defensor central. Nadie me creía que jugaba en ese puesto porque tenía mucha velocidad. Como atleta mi característica es la velocidad, que es fundamental. También es la resistencia, ya que soy un poco fuerte. En la salida lo que a veces me es un poco complicado. Pero estoy puliendo eso para estar a mi máximo nivel.
Una de las personas que me ha marcado en esta vida es mi entrenador Plinio Penzi que siempre está conmigo desde que vine acá, es como mi segundo papá. Cuando vine recién no tenía cómo quedarme, él me abrió la puerta de su casa, me alimentó, me cuidó como un hijo.
Siempre estoy con él y estamos trabajando bien gracias a Dios. Es un profesional que sabe muchas cosas y yo sé que él me va a ayudar a alcanzar muchos logros. Él me habla como padre, siempre me dice y me orienta sobre lo que no debo hacer en mi vida.
Hasta ahora mis logros como atleta son el récord nacional de mayores de 200, tengo el récord de 100 de U23, llegué a finales del Sudamericano del U23 que fue en el 2021 en Ecuador, después logré la medalla del 4X100 en los Juegos Bolivarianos el año pasado en Valledupar.
En los Juegos Odesur obtuve medalla de plata en los 4X100. Logré el campeonato de Estados Unidos donde competí en dos carreras. Esos son mis logros que estoy alcanzando de a poco y voy a buscar más.
Este año como equipo queremos alcanzar una medalla en los Juegos Sudamericanos de mayores y posicionarme bien en los Panamericanos.
Tengo como regla de oro ser disciplinado, para entrenar este deporte, tenés que ser disciplinado, tenés que cuidarte, alimentarte, no farrear para no meterte en vicios, eso lo que me dice mi entrenador y que tengo que ser disciplinado para alcanzar mis metas.
Esos son los factores que siempre llevo en cuenta. Yo este deporte lo tomo como un trabajo porque es un deporte que amo y en el que quiero sobresalir.
No me gusta luego la farra. Si es que hago eso, sé que mi cuerpo no me va a responder al 100%, no me va a ayudar, entonces será una pérdida de tiempo venir hasta acá.
Yo me propongo objetivos grandes y quiero cumplir con eso. El año pasado fui al Mundial de atletismo y el año que viene quiero ir a los Juegos Olímpicos. Mi mayor sueño es estar en los Juegos Olímpicos y representar bien a mi país.
Ese es el objetivo que tengo en mi cabeza, por eso vengo todos los días a entrenar acá como se debe porque quiero estar allá.
Tengo como modelo a seguir a algunos atletas. Entre ellos, Usain Bolt. Nunca le vi, pero él es uno de los ejemplos que sigo. Siempre veo sus videos para motivarme.
A quien sí le vi personalmente es a Fred Kerley y es un atleta que también es mi modelo a seguir. Es uno de los mejores en 100 metros.
Siempre veo sus historias, es un atleta que pasó también por mucho, según su historia Eso también llevo en cuenta, ahora es uno de los mejores. No importa de donde uno venga, si pone su esfuerzo puede llegar a ser grande.
El apoyo de la familia es muy importante. Nosotros somos 12 hermanos del mismo padre y madre. Al igual que mis padres, ellos me apoyan mucho. Digo que el día que vengan todos a verme competir, voy a tener una pequeña hinchada.
El año pasado viví algo único, cuando mi papá y mi mamá me vieron correr en vivo en los Juegos Odesur.
Cuando estaba en la pista y vi hacia la gradería le vi a mi papá y mi mamá. Yo sabía que ellos estaban allí y cuando corría parecía que estaban detrás de mí y que me decían “Fuerza, mi hijo, vos vas a lograr, vos vas a poder”. Eso fue lo que me pasó por la mente en ese momento.
Cuando gané la medalla, yo les dije que era de ellos, les dije “ustedes lucharon conmigo y esta medalla les voy a dar como recompensa”, le dije a mi mamá y se puso feliz.
Sentí algo muy lindo al representar a mi país en los juegos que se hicieron acá y lograr una medalla. Con mi compañero de equipo nos pusimos ese objetivo y lo logramos.
Cuando nos vamos al Comité Olímpico para entrenarnos se me pone la piel de gallina recordando esa noche y sé que es algo que nunca más lo voy a olvidar.
Estoy estudiando Ciencias del Deporte. Cuando me reciba quisiera especializarme para ser entrenador de atletismo y enseñarles a los chicos lo que aprendí.
Creo que falta más apoyo de parte del Estado. Tenemos muchos atletas buenos y por el tema económico algunas veces dejan esto y eso duele realmente. Paraguay puede estar en un nivel muy alto en cada deporte.