El mal hábito no solo es de personas de escasos recursos, que no tuvieron oportunidad de acceso a educación; también distintas empresas aportan desechos industriales.
EVIDENCIAS. La Costanera Norte recibe a los transeúntes con un olor fétido. Se intensifica de noche, por las posibles descargas principalmente en ese horario. El barrio Tablada se encuentra en esta zona. Es el último tramo por donde atraviesa el Mburicaó, en medio de frigoríficos, graserías, chancherías y de viviendas de personas en su mayoría dedicadas al reciclaje. Las basuras sólidas quedan estancadas en las orillas, entre vegetaciones. Otras se impregnan en el lecho del cauce.
En la minga organizada por el Municipio, en mayo, se extrajeron del cauce cerca de 22.000 kilos de basura.
El vertido de desechos industriales es notorio por la acumulación de grasa en grandes dimensiones. Solo esta semana flotaban además bloques de masa verde oscura, parecidos a excremento de ganado.
En el 2018, a través de imágenes viralizadas, se evidenció el vertido de sangre animal. Ese mismo año, el diseñador de modas Andrés Báez presentó la colección Mburicaó; tiñó vestidos de alta costura con el agua roja del arroyo, como forma de evidenciar el alto nivel de contaminación.
ESCASOS REPORTES. La Municipalidad de Asunción, el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) y la Unidad de Delitos Ambientales del Ministerio Público no cuentan con un plan en conjunto para ejecutar sostenidos monitoreos en uno de los recursos hídricos más dañados de la capital. “Es relativo el monitoreo en conjunto. Muchas veces, de acuerdo con la urgencia, nos vamos solos nomás”, expuso el director de Fiscalización del Mades, Julio Mareco.
En los últimos meses –comentó– solo hallaron irregularidad en una de las graserías, tras denuncia de olores.
En cuanto a frigoríficos, los últimos registros del ente ambiental en los que se constató irregularidad figura de enero del 2021. Se trata de una empresa ubicada sobre Capitán Lombardo, del barrio Tablada, pero no se describe el nombre de la firma. Allí se constataron deficiencias en el sistema de tratamiento de efluentes y la mala disposición de restos ruminal y bosta. Mareco señaló que se trató de una firma chilena.
En la Municipalidad de Asunción, actualmente no reportan sumarios abiertos a alguna de las industrias de la zona, tras alegar que realizan controles aleatorios en los últimos meses, según Cristian Rejala, jefe del Departamento de Recursos Naturales y Adecuación Ambiental. Sin embargo, el reclamo ciudadano por los olores fétidos, que afectan a la calidad de vida, son constantes.
VERTEDERO DE EMPRESAS. Rejala afirmó que realizan monitoreos de vertederos clandestinos. Consideró que es uno de los principales flagelos. Señaló que semanas atrás se incautaron en horario nocturno de un camión repleto de residuos sólidos que iban a parar a vertederos en la zona del Mburicaó.
“Son de esos camiones de 5.000 kilos repletos de tambores y bolsas de basuras sólidas y líquidas. Todo eso va a parar a vertederos clandestinos, en zona de Tablada, en Lombardo; terminan en el Mburicaó. Son personas que evaden las tasas municipales”.
Indicó que se trataría de comercios, restaurantes y bares que contratan a personas para retirar los grandes volúmenes de basura y depositar en vertederos ilegales. Aseguró que derivan los casos al Ministerio Público.