Según el XIV Informe Anual de Derechos Humanos de la Diversidad Sexual en Chile, elaborado por el Movilh, durante el año pasado se registraron 258 abusos, entre ellos 3 asesinatos -2 menos que en 2014-, 45 agresiones físicas, 16 casos de marginación laboral, 18 de tipo educacional y 176 otras situaciones de discriminación.
Según el texto, lo anterior contrasta con 67 hitos positivos para las minorías sexuales, como 8 fallos judiciales favorables que coronaron a 2015 como el “año de la justicia”.
Entre ellos la organización destacó la posición de la Justicia frente a la distribución del libro infantil “Nicolás tiene dos papás”, que reconoce a la familia homoparental y fue censurado por sectores conservadores.
Además, la legislación condenó diversos discursos de odio, autorizó el cambio de nombre y sexo legal de un hombre trans y entregó el cuidado personal de una niña de cinco años a una mujer lesbiana, hechos que “marcaron un antes y un después” en relación a los derechos de las minorías sexuales.
“El Poder Judicial, por primera vez en su historia, fue más liberal o menos conservador que el Gobierno y el Parlamento”, señaló el Movilh, que enfatizó que el Estado actuó de manera “ineficiente” a la hora de saldar deudas históricas.
El estudio remarcó que durante 2015 hubo un “inesperado” aumento de denuncias por homofobia y transfobia, a raíz del empoderamiento de las personas LGBTI, quienes exigieron más espacios y más derechos.
El Movilh manifestó, sin embargo, preocupación por el “alto nivel” de violencia en la población, debido al “descontento de los opositores a la igualdad” tras la aprobación del Acuerdo de Unión Civil (AUC) y el posible avance de leyes que reivindiquen los derechos de la diversidad sexual.
De los 258 casos de abusos, la población transexual concentró el 15 % con 40 casos, la mayor cifra reportada en un año, las lesbianas o bisexuales el 17 %, los hombres homo-bisexuales el 20 %, mientras que un 48 % afectó a personas LGBTI en su conjunto.
El alza de la violencia ejercida contra las personas trans, de un 135 % respecto de 2014, se atribuyó al “reconocimiento de sus derechos, así como a las movilizaciones de reducidos sectores contra la ley de identidad de género”.
El estudio celebró además que por primera vez en siete años no hubo abusos policiales y que las declaraciones homofóbicas cayeron un 46,2 %.
El Movilh identificó a 60 instituciones y 152 personas responsables de abusos contra minorías sexuales, sin cambios relevantes respecto de años anteriores, con excepción de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, cuya presidenta, Jacqueline Van Rysselberghe, según el informe, “ha utilizado esta instancia para canalizar sus ideas contrarias a los derechos de personas LGBTI”.
En la lista destacan también el partido ultraconservador Unión Demócrata Independiente (UDI), “por su homo y transfobia”, la municipalidad de Talca, el Opus Dei y el Centro de la Familia de la Universidad Católica, entre otros.
El Movilh elogió los avances en políticas públicas, derechos humanos, cultura, espectáculos y deportes, además de la aprobación y promulgación del AUC y el ingreso al Parlamento de un proyecto que promueve el respeto a niños y niñas LGBTI, así como el inicio del debate sobre la adopción homoparental en el Congreso.