La breve historia de amor entre Frida Kahlo y León Trotski es más o menos conocida. León Trotski había llegado a México a comienzos de 1937 junto a su mujer Natalia Sedova. Tenía casi 60 años y venía de un largo periplo en el exilio, perseguido por Stalin. Finalmente, el refugio político llegó desde México. Las gestiones ante Lázaro Cárdenas las había hecho el muralista Diego Rivera. Fue así que él y su mujer, Frida Kahlo, le ofrecieron al matrimonio ruso su propia casa en el barrio de Coyoacán.
A partir de la llegada a la casa azul, Frida y Diego parecen fascinados con la figura de Trotski. Al fin y al cabo, en él, en ese cuerpo viejo, cansado, en el pelo desprolijo y en la barba puntiaguda está encarnada toda la teoría revolucionaria de los últimos 100 años.
REPARTO. Los personajes son interpretados por Jazmín Romero como Frida Kahlo, Gustavo Ilutovich como León Trotski, Héctor Silva como Diego Rivera y Chela Villagra como Natalia Sedova, la esposa de Trotsky.
El vestuario es una creación de Alejandra Ardissone, la puesta de luces fue diseñada por Santi Schaerer y las imágenes realizadas por Juan Florenciáñez.
Los horarios de las funciones están sujetos a modificaciones por el decreto gubernamental. Los artistas aguardan respuesta sobre el pedido de permitir la circulación del público que asiste a los espectáculos mediante comprobante de acceso (invitaciones, boletas de entrada, tique, otros).