“Debemos hacer siempre el bien. Y bien sabemos que no es fácil para nosotros amar al prójimo. Y estamos viendo en estos últimos tiempos, esta semana que pasó, cuántas tragedias sentimentales, familiares, que nos produjeron inmenso dolor”, expresó.
Enfatizó que amar no implica querer al que nos ama, sino también a los enemigos. “Rezar por el que te persigue. Jesús, con su ejemplo y con su gracia, ha creado incluso hasta la misma posibilidad de amar igualmente al enemigo”.
Además, destacó el valor de pedir perdón, de hacerlo en la familia, en especial en las relaciones entre el marido y la esposa.
“Muchas dificultades y muchas crisis matrimoniales nacen del hecho de que cada uno espera que el otro sea el primero en ofrecer su sonrisa después de una pelea o que diga la primera palabra de reconciliación. Es necesario convencerse de que no es humillante adelantarse”.
La reliquia de San Roque González de Santa Cruz estuvo en la Basílica de Caacupé. El obispo destacó que el pasado 16 de mayo se recordó el día de la canonización del santo paraguayo. RG