Aiko, de 9 años, regresó hoy a la prestigiosa escuela Gakushuin de Tokio acompañada de la princesa Masako, quien la acompañó también de vuelta al final de las clases de la mañana, informó la Agencia de la Casa Imperial nipona.
Los príncipes herederos de Japón Naruhito (3º izq) y su mujer Masako (2ª izq) acompañados de su hija, la princesa Aiko (izq, delante), durante un viaje oficial a Holanda en 2006. EFE/Archivo | Ampliar imagen
La niña se había quejado de dolor de estómago y ansiedad, lo que hizo que no acudiera a la escuela desde el pasado 1 de marzo.
Al parecer, un grupo de alumnos de segundo grado estuvo acosando a varios de sus compañeros, entre ellos la princesa Aiko, lo que llevó al Palacio Imperial a intervenir y pedir medidas a los responsables del colegio, informó la agencia Kyodo.
Un responsable de la escuela, sin embargo, negó que la pequeña hubiera sufrido “directamente” acoso, añadió la agencia.
El caso ha supuesto la primera ocasión en la que la Casa Imperial airea los problemas en la escuela de la princesa Aiko.
La niña es la hija única de Naruhito y Masako, a quien se conoce como “la princesa triste” por la depresión inducida por el estrés que sufre desde hace años.
Muchos achacan su estado de depresión a la rigidez del protocolo de la Casa Imperial y a las fuertes presiones que ha soportado para tener un hijo varón que perpetúe la línea imperial nipona.
Según la Ley de Sucesión vigente en Japón, solo un hombre puede convertirse en emperador, lo que impide que Aiko sea heredera al milenario Trono del Crisantemo.
El siguiente en la línea sucesoria tras Naruhito es el primo de Aiko, el príncipe Hisahito, de tres años.
