17 jun. 2025

La economía

Está terminando un año con resultados económicos mixtos. El PIB crecerá a tasas de dos dígitos, pero las ventas minoristas experimentaron caídas sustanciales impactadas negativamente por el contrabando.

Foto: UH Edicion Impresa

Foto: UH Edicion Impresa

Sin embargo, se aprobaron leyes sumamente importantes para el desarrollo económico del país. La Ley de Responsabilidad Fiscal, la Ley de Alianza Público-Privada, la Ley del Iragro que conjuntamente con la Ley del Fonacide aprobada en el 2012 enmarcan las reglas del juego para lograr un incremento gradual pero significativo de la inversión en infraestructura, en educación y en salud en los próximos años, pero con un equilibrio estructural y sostenibilidad de las finanzas públicas.

Mirando hacia el próximo año, el escenario internacional se presenta razonablemente bueno para nuestro país.

Si bien el inminente retiro de los estímulos monetarios por parte del Banco Central de EEUU reducirá la disponibilidad de capitales para los mercados emergentes, nuestro país no es dependiente de estos capitales y su impacto será poco significativo.

En este sentido, es más importante la recuperación del crecimiento de la economía americana (se proyecta un crecimiento cercano al 3% para EEUU en el 2014), que por su tamaño, permitirá un respiro en la economía mundial y que la economía china pueda avanzar más gradualmente en su aterrizaje hacia un modelo de desarrollo más orientado hacia el mercado interno. Esto implica una demanda mundial sostenida de alimentos, con precios en niveles razonables.

A nivel regional, las dificultades van a continuar.

Para Brasil, con problemas estructurales de competitividad y que por su alta dependencia será más golpeado por el menor flujo de capitales, se proyecta un crecimiento menor al 2,5% en un año de elecciones.

En la Argentina, se espera que continúe esta especie de “administración del deterioro” de un modelo económico inconsistente. Lo más relevante para nuestro país es el mantenimiento de la política de control de cambios con una amplia brecha entre el tipo de cambio oficial y el blue que seguirá actuando como un incentivo a la compra en las ciudades fronterizas. En este sentido, el régimen de controles actual y la creación del régimen de pequeños importadores es un paso positivo para mitigar sus efectos negativos.

A nivel interno, gracias a años de manejo ordenado de la economía, nuestro país ha empezado a emerger como una oportunidad para la radicación de inversiones considerando los recursos estratégicos que ofrece como la energía eléctrica, las materias primas, gente joven cada vez mejor calificada y una economía libre con un sistema tributario simple e impuestos bajos.

En este sentido, la reinserción en el Mercosur que ha clarificado nuestro acceso al mercado regional, más la renovación de las preferencias arancelarias por parte de la Unión Europea son fundamentales para consolidar la inserción de Paraguay en las cadenas industriales de la región y el incremento en la inversión extranjera directa.

Por otro lado, el Congreso ha aprobado un Presupuesto para el 2014 mucho mejor que los años anteriores. Los gastos rígidos no fueron incrementados y esto permitirá al Poder Ejecutivo controlar los gastos corrientes, incrementar la inversión en infraestructura y reducir el déficit fiscal al 1,5% del PIB y así transmitir el compromiso del país con la disciplina implícita en la Ley de Responsabilidad Fiscal para generar confianza en la misma como un instrumento de gestión de gobierno.

Con este escenario, el 2014 se perfila como un año normal y la economía crecerá a su ritmo potencial del 4,7/4,8% anual, superior al promedio de América Latina y con una inflación de los precios de la canasta familiar entre el 5,0/6,0% anual.

Este desempeño refleja un país con un crecimiento económico equilibrado, creando oportunidades para la gente y con políticas económicas consistentes y sostenibles en el mediano plazo.

(*) Economista, ex ministro de Hacienda y miembro de la Fundación Desarrollo en Democracia (Dende).