31 may. 2024

Juez debe admitir proceso contra ex legislador que ya no cuenta con fueros

En la Fiscalía.  Óscar  Núñez cuando acudió ante el fiscal.

En la Fiscalía. Óscar Núñez cuando acudió ante el fiscal.

El juez penal de Garantías de Villa Hayes, Víctor Hugo Ronzewsky Maziuk, debe admitir el proceso penal contra Óscar Venancio Núñez Giménez, imputado por un perjuicio patrimonial de G. 3.600 millones, por presuntos hechos de corrupción durante su gestión como gobernador de Presidente Hayes. Esto, debido a que ya no cuenta con fueros, porque ya dejó de ser diputado.

Desde el 2015 que la causa se encuentra paralizada, ya que Núñez Giménez, hermano de Basilio Bachi Núñez, ex asesor político del presidente Horacio Cartes y actual diputado, nunca fue desaforado.

La imputación fue presentada por el ex fiscal anticorrupción Martín Cabrera por el delito de lesión de confianza. También fue imputada Nancy Genoveva Núñez de Roussillón, ex directora de Administración y Finanzas de la Gobernación.

Según la investigación fiscal se detectó que la Gobernación de Presidente Hayes poseía tres cuentas en el Banco Familiar con un movimiento de G. 11.000 millones. Estas cuentas eran utilizadas para pago de sueldos a funcionarios y concejales y gastos corrientes.

También menciona que los cheques emitidos por la Gobernación en estas tres cuentas corrientes “no tienen documentación alguna que respalden sus libramientos y, por ende, las erogaciones”.

Por otra parte, Núñez Giménez cuenta con otros dos procesos penales por un presunto perjuicio total de más de G. 31.000 millones, también en la Gobernación. Ambos casos se encuentran trabados, ya que se recusó al juez Ronzewsky.

Más contenido de esta sección
Demasiados episodios grotescos en una semana como para no dedicarles unas líneas.
Tras las impactantes revelaciones que se obtuvieron con la operación Dakovo, que logró exponer tan explícitamente los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas, sobrevino una situación por de más escandalosa: la implicación de altos militares en actividades criminales. Esta fue sin dudas una dolorosa comprobación del elevado nivel de infiltración del poder mafioso dentro de las instituciones del Estado paraguayo. Además de ser profundamente vergonzoso, esto implica un ataque a la democracia.
El Congreso Nacional rompió récord esta semana con el proyecto de la ley de superintendencia; los senadores tardaron 15 minutos para aprobar; los diputados 11 minutos. En una convulsionada jornada, los diputados también aprobaron ley que suaviza penas para corruptos y los senadores salvaron al cartista Hernán Rivas, acusado de tener un título falso de abogado. Y como les quedó tiempo, también mutilaron la ley de puerta giratoria. Este es el espantoso combo navideño que el Parlamento le ofrece al pueblo paraguayo.
Los impactantes resultados de la operación Dakovo lograron exponer en forma explícita los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas. En nuestro país, logró la detención de más de una decena de personas involucradas en un esquema de tráfico internacional de armas y una nota gravísima, entre los detenidos están un militar de alto rango así como ex funcionarios de la Dimabel. Es muy preocupante la manera en que la mafia y el crimen organizado están socavando nuestra soberanía y nuestra democracia.
No fabricamos armas, pero las comercializamos en cantidad industrial. No producimos cocaína, pero el país es depósito, ruta y puerto de embarque de cantidades industriales que llegan a los principales mercados del mundo.
Eduardo Nakayama abandona el PLRA. Solo y apresuradamente, dicen. Quién sabe. Explica que no ve ninguna posibilidad de que su partido pueda desprenderse de la infiltración cartista. Desde adentro ya no hay nada que hacer, sostiene.