Miguel Alejandro Lugo, de 18 años, era un recluta del Comando de Artillería de Paraguarí, que visitaba los fines de semana a sus padres en Acahay.
Aprovechando su estadía, decidió ayudarlos e intentó cambiar un portafocos, pero desafortunadamente sufrió una descarga eléctrica.
Al observar lo que sucedía, su padre corrió hasta el tablero y bajó la llave principal para poder ayudarlo.
Aunque su familia lo auxilió rápidamente, ya llegó sin signos de vida al hospital local, informó NPY.
La tragedia conmocionó a la comunidad de Acahay, donde el joven era considerado un ejemplo.