Biden contestó así a una periodista que preguntó al inquilino de la Casa Blanca si aún consideraba que Xi era un “dictador”, a lo que el líder estadounidense contestó: “Bueno, mira, lo es”.
El pasado junio, Biden llamó por primera vez “dictador” a Xi, lo que provocó un gran malestar en el gigante asiático.
La portavoz de la Cancillería china, Mao Ning, indicó que las palabras del presidente estadounidense son “extremadamente erróneas y constituyen un acto político irresponsable”.
Sin embargo, el Ministerio de Exteriores chino no recogió en su transcripción rutinaria de la rueda de prensa diaria ninguna mención a las declaraciones ni de Biden ni de Mao.
La portavoz señaló que el diálogo y la cooperación son “las únicas opciones correctas” para China y Estados Unidos en su relación bilateral.
Las declaraciones de Biden embarraron la agenda de Xi en San Francisco, donde asiste esta semana al Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) y donde ha abogado por “tender puentes”.
Durante una cena con empresarios estadounidenses en la ciudad californiana –con presencia, entre otros, de Elon Musk, de Tesla, y Tim Cook, de Apple–, Xi declaró: “Debemos construir más puentes y pavimentar más caminos para la interacción de personas a personas. No debemos levantar barreras”.
Sin embargo, el mandatario recomendó durante su intervención que el país norteamericano “no apueste contra China” ni “interfiera en sus asuntos internos”. EFE