En el Hospital de Especialidades Quirúrgicas Ingavi del Instituto de Previsión Social (IPS), desde enero del 2026 se implementarán nuevas técnicas para el tratamiento de litiasis renales (piedras en los riñones o en las vías urinarias).
Entre las nuevas técnicas se incluirán las cirugías endoscópicas digitales y minipercutáneas, que son procedimientos innovadores para el tratamiento de cálculos renales, enfocados en extraer o fragmentar los cálculos con mínima invasividad, explicó el doctor Daniel Romero, jefe de Urología del Hospital Ingavi.
La cirugía minipercutánea renal, también llamada cirugía mínimamente invasiva o mini-perc, es un tipo de procedimiento quirúrgico que se realiza a través de incisiones muy pequeñas, de aproximadamente 5-8 milímetros.
Esta técnica se utiliza en diversos tratamientos, como la extracción de cálculos renales grandes o complejos, con el beneficio de un menor sangrado, menos complicaciones y un tiempo de hospitalización más corto en comparación con las técnicas tradicionales, explicó.
El jefe de Urología mencionó que este procedimiento se utiliza en casos de litiasis de gran carga (más de 3 cm) que se encuentran dentro del riñón, y en algunos cálculos de pequeña o mediana carga que se encuentran en posiciones difíciles de acceder con otros métodos.
Uso de chip. En cuanto a la ureteroscopia digital, su tecnología utiliza un chip de cámara electrónica en el extremo del instrumento, el cual se introduce por orificios naturales del árbol urinario (uretra, uréteres, riñón) sin realizar cortes o incisiones.
Con este procedimiento, se proporcionan imágenes de mayor resolución, más brillantes y con menos distorsión que los sistemas de fibra óptica tradicionales, además de permitir el ingreso a cualquier parte del árbol urinario superior.
Además, permite una visualización más detallada de las estructuras urológicas y mayor maniobrabilidad, lo que facilita el diagnóstico y el tratamiento, como la extracción de cálculos o la identificación de tumores.
¿En qué casos se utiliza la ureteroscopia? Esta metodología se utiliza principalmente para el tratamiento de litiasis de baja o mediana carga (hasta 3 cm de diámetro). Estas técnicas están ganando terreno como el estándar para tratar cálculos renales complejos, reduciendo la necesidad de cirugía abierta y acortando el tiempo de recuperación de los pacientes.
El costo en un centro privado de estos procedimientos se encuentra alrededor de los USD 7.000, lo que equivaldría a aproximadamente G. 50 millones, según el IPS.