No contento con eso, el intendente, sin los mínimos cuidados correspondientes, incluso bailó con su madre en la vereda de la casa, ante un reducido grupo de colaboradores cercanos y demás familiares, violando claramente el protocolo tras salir de terapia intensiva por un cuadro del nuevo coronavirus.
Cabe señalar que Yd obtuvo el pasado 1 de enero el alta médica del Ineram, donde estuvo por espacio de siete días, incluso en la sala de cuidados intensivos.
“Gracias, Encarnación, por el afecto. Volví con la convicción y el compromiso de defender, como siempre, los intereses de la ciudad. Llegué a Encarnación y fui recibido por mis familiares, fue un momento de mucha alegría y estuve compartiendo con mi familia. Yo ya no tengo Covid, tengo mi alta médica y estoy en mi domicilio guardando días de descanso, libre del virus, sano y vivo”, señaló Yd.
Por otro lado, el intendente agradeció a los médicos y enfermeros que lo asistieron en este periodo de tratamiento de la enfermedad, y anunció además que regresará a sus actividades a partir del 8 de enero. La actitud del jefe comunal encendió el debate en los medios y redes sociales, donde muchos lo criticaron duramente por protagonizar el acto sin ninguna medida preventiva, como el uso de barbijos, y otros lo felicitaban por haber superado el cuadro de Covid-19