El título del libro es Fondo Binacional Itaipú por USD 100 mil millones, debido a que en 50 años esos USD 2.000 millones anuales podrán constituir la cifra total consignada, según proyecta el analista.
“Si la tarifa fuera estrictamente igual que el costo de producir la electricidad, alrededor de USD 9,61 kW/mes, entonces Paraguay no dispondría de esos fondos no reembolsables y debería endeudarse por USD 50 mil millones en unos 50 años, para lograr el desarrollo; es decir más de tres veces la deuda externa actual, de alrededor de USD 16,7 mil millones”, sostiene.
El profesional insiste en que se trata de una oportunidad grandiosa porque significarán recursos propios del Paraguay y Brasil, no deuda externa, y con disponibilidad acumulada y potencial de duplicarse con recursos del sector privado; además de ser un capital inicial para el futuro Banco del Mercosur.
“Paraguay requiere financiamiento suficiente y en condiciones adecuadas para llevar adelante los programas que pertenecen a desafíos superiores, transversales y de transformación”, mencionó el economista.
En el horizonte, el Paraguay deberá realizar esfuerzos considerables en ir disminuyendo los obstáculos a su desarrollo, de acuerdo con Centurión. Entre aquellos se encuentra el financiamiento, y el investigador propone la creación del fondo citado, derivado de la renegociación del Anexo C.
“Eso significará recursos propios del Paraguay y Brasil, no deuda externa, y una gran disponibilidad acumulada y potencial de duplicarse con recursos del sector privado; además de ser un capital inicial para el futuro banco del Mercosur”, agregó.
Las negociaciones por el Anexo C están suspendidas desde el 1 de abril; quiere decir que mañana se cumplirán cinco meses.
Entretanto, se siguen postergando los eventuales beneficios, puesto que aún no se tiene definido cuáles serían los valores razonables de remuneración al Estado.