El senador Rafael Filizzola calificó como “particularmente grave” el caso que involucra a legisladores grabados hablando sobre dádivas y compra de votos, a partir de audios. Según Filizzola, no hay evidencia de alteración en estos registros y las declaraciones de los afectados confirman los hechos.
Filizzola recordó que Estados Unidos había designado “significativamente corrupto” al ex presidente Horacio Cartes, señalando la existencia de sobornos a parlamentarios. “Sí, por eso este caso en particular es particularmente grave. No solamente el informe del Departamento de Estado”, afirmó.
El dirigente mencionó que en 2018, al inicio del gobierno de Cartes, funcionaba la fundación Telmo Cartes, que supuestamente financiaba asesoramiento para legisladores. “Es absolutamente irregular que un legislador reciba algún tipo de sobresueldo, porque además no era público. Tenía que trabajarse con cooperación, bancarizado, pero en este caso era totalmente informal”, explicó.
Filizzola precisó los montos implicados: hasta un millón de dólares por votos relacionados con la enmienda y cifras de alrededor de USD 10.000 vinculadas a la fundación. “Desde hace mucho tiempo se habla de dádivas a parlamentarios, de compraventa de votos, es decir, de mercantilización del voto del Congreso”, enfatizó.
El senador comparó la situación con otros casos recientes: “No soy muy partidario del tema de pérdida de investidura por la mayoría calificada, pero en el caso de Kattya González y anteriormente de Payo Cubas se removió del cargo con mayoría simple. También tenemos el caso de Noelia Cabrera, que fue grave, pero este caso es particularmente grave”.
Filizzola alertó además sobre amenazas registradas en los audios: “Una de las afectadas dice que si se va, arrastrará a otro y pedirá otra pérdida de investidura. Básicamente está diciendo que hablará más de lo que ya habló en esos audios”.
Sobre la participación de Itaipú, Filizzola señaló la necesidad de investigar presupuestos millonarios en dólares para vehículos planilleros, indicando que los recursos públicos también podrían estar implicados.
Respecto al origen de los audios, Filizzola no descartó espionaje ilegal: “Si se plantaron micrófonos en las oficinas, eso también es sumamente grave y debe investigarse por cuerdas separadas. Señalaría una red de espionaje ilegal probablemente orientada a chantajear a legisladores, lo cual no es menos grave”.
Finalmente, destacó la responsabilidad del Congreso y de la Fiscalía: “Espero que lo del fiscal general sea sincero. Independientemente del origen de los audios, tenemos evidencias que señalan mercadeo de voto. El Congreso no puede permitir que una situación como esa quede impune”.