Tras el recuento de más del 99,3% de los votos, el PP sumó 136 escaños, lo que supone 47 más que en los comicios de 2019; por delante de los 122 conquistados por los socialistas, dos más que hace cuatro años.
Este resultado –en apariencia favorable– es muy inferior al objetivo que aspiraba el candidato conservador, Alberto Núñez Feijóo, quien buscaba llegar hasta los 150. Por lo que, esto viene a complicar la posibilidad de la formación de un Gobierno.
Es decir, ninguno de los bloques de derecha e izquierda reúnen en principio representantes suficientes como para llegar a una mayoría absoluta (176 escaños) en la primera vuelta de una investidura o simple en una segunda con más votos a favor que en contra.
ceden escaños. El ultraderechista Vox perdió 19 escaños en estas elecciones y se queda con 33 diputados en el Congreso; mientras que la plataforma de izquierdas Sumar se situó como cuarta fuerza con 31 escaños, cuatro menos que los que obtuvo su predecesora Unidas Podemos en los anteriores comicios.
Entre las fuerzas independentistas, los catalanes de ERC sufren un duro revés, al caer de 13 a 7 representantes, y los de Junts per Catalunya pierden uno y se quedan con seis; en tanto que los vascos de EH-Bildu superan por vez primera al Partido Nacionalista Vasco (PNV), con seis diputados frente a cinco de estos últimos.
Los gallegos del Bloque Nacionalista Gallego (BNG) conservan su único escaño, Coalición Canaria logra uno y también los regionalistas navarros de Unión del Pueblo Navarro (UPN), de modo que el nuevo Congreso quedará muy fragmentado con once partidos diferentes.
A pesar de este descenso, estas formaciones pueden seguir teniendo la llave para la formación del Gobierno.
Mayor participación. La participación en estas elecciones fue del 70,18%, casi 4 puntos más que las cifras registradas en las generales del 10 de noviembre de 2019, cuando fue del 66,23 por ciento, según datos oficiales.
Un aumento en el que incidió el voto por correo de 2,4 millones de electores, una cifra histórica en la democracia española propiciada por el periodo vacacional en el que fueron convocadas estas elecciones.
hará el intento. Luego de conocer su virtual victoria, el líder del Partido Popular español, Alberto Núñez Feijóo, manifestó que pretende “intentar” formar gobierno tras ser la fuerza más votada en las elecciones parlamentarias de la víspera; aunque tiene menos opciones de tejer alianzas para gobernar que el socialista Pedro Sánchez.
“Como candidato del partido más votado, creo que mi deber” es “intentar gobernar nuestro país”, expresó Núñez Feijóo a los simpatizantes del PP congregados ante la sede del partido, tras lograr meter 136 diputados por delante de los 122 del PSOE.