La parlamentaria, quien es presidenta de la Comisión de Pueblos Indígenas, había sufrido golpes y quedó con secuelas, según ella misma expresó durante la sesión de la Cámara de Diputados el miércoles pasado.
Ella y su comitiva querían acercarse al presidente Mario Abdo Benítez durante el acto de inauguración de dos tramos del Corredor Bioceánico, pero fueron impedidos por integrantes del REP, quienes la empujaron.
No obstante, la parlamentaria, pese a las agresiones, pudo llegar hasta donde estaba el jefe de Estado para saludarlo y reclamar la actitud de sus guardias.
De acuerdo con la nota remitida por Granado Rolandi, los responsables de las agresiones tuvieron una severa llamada de atención, “a más del apercibimiento disciplinario” de los mismos, que constituyen una sanción “moral con fines correctivos”.
Diputados de diferentes bancadas y del propio Partido Colorado se pronunciaron en repudio a la violencia de la que fue víctima su colega.