Detrás del personaje. Reinaldo Sanabria es oriundo de la Perla del Sur, Encarnación, en el Departamento de Itapúa.
Hace 30 años, llegó a Lambaré, ciudad que adoptó como su hogar y nunca más se fue, y desde ahí, crea imponentes y hermosas piezas de barro, lo que hizo que se ganara el apodo de El Rey del Barro.
Muchos creen que el artista comenzó desde pequeño en este mundo del esculpido, pero la realidad es que su habilidad se encontraba dormida y bien impregnada en sus venas, pero despertó una tarde ya de grande, cuando armó una imagen de un santo con un poco de barro que tomó prestado de su hermana, quien se dedicaba a los arreglos florales.
Recordó que un domingo había utilizado un pedazo de barro para realizar una escultura para su madre, le pasó un poco de barniz y una amiga suya le dijo que si realmente él lo hizo que quería uno igual y le pagaría por el trabajo.
“Amo lo que estoy haciendo porque voy pintando y esculpiendo lo que es mi cultura. Yo vengo de una familia humilde y trabajadora del campo, la Uriega. Entonces, para mí es un honor esculpir muchas veces las figuras autóctonas de nuestro país y eso me llena de alegría”, señaló.
Trabajos con memoria. Sanabria cuenta con varias obras; entre sus favoritas se encuentran una del rostro de Cristo y una escultura en cemento y cerámica de Juan Pablo II, que está en la iglesia Divina Misericordia, en Cocué Guazú, en la ciudad de Areguá.
Sus trabajos no solo llegan a manos de grandes personalidades a nivel nacional, sino también a nivel mundial. Entre los artistas que cuentan con una obra de Sanabria se citan a la cantante colombiana Shakira, el cantante mexicano Marco Antonio Solís, entre otros destacados.
Indicó que con sacrificio, persistencia y mucha fe se puede vivir del arte en el país. Rememora que cuando comenzó en el oficio le fue un poco difícil por la escasez de clientes, pero que a la fecha vive de esto y lo hace muy feliz.
Paseo del Barro. Este paseo nace con el fin de recuperar el valor familiar, de la amistad entre vecinos y aseguró que habrá muchas actividades más con el propósito de ayudar a muchas personas.
“Yo creo que la solidaridad podrá salvar al mundo. Mi objetivo es ayudar a la gente, y hacer lo que esté a mi alcance, es hora de que uno tiene que ser feliz día a día y no hacer mal a nadie”, sentenció.