Las lluvias retornaron con fuerza en Ñeembucú. Para los productores estas precipitaciones son muy beneficiosas. En tan solo una semana cayeron más de 100 milímetros; estos indicadores, según los expertos en clima, son señal de que el fenómeno El Niño ya está activo.
Estas condiciones climáticas posibilitan que en Ñeembucú, los esteros y cañadas recuperen niveles de agua, tras pasar por varios años de escasez y de sequía extrema, los cuales causaron cuantiosas pérdidas al sector productivo, en especial a la pecuaria, que es la más fuerte del departamento.
La limpieza de canales naturales es clave para facilitar el drenaje directo hacia cauces fluviales; así como la identificación de áreas sensibles.
En Pilar se espera con optimismo que la defensa costera evite las cíclicas crecidas. JJB