Dentro de la sala de Urgencias del Hospital Nacional de Itauguá (HNI), el espacio resultaba pequeño para la cantidad de pacientes. Tanto es así que dos de ellos aguardaban acostados en una camilla en el pasillo.
Afuera, los familiares aguardaban novedades sobre el estado de sus pacientes bajo el techo y soportando el calor húmedo de la mañana.
“En esta parte ya estamos empezando a trabajar. La Urgencia ya no da más. Vamos a ampliarla”, describe el director del Nacional de Itauguá, doctor Miguel Ferreira Bogado.
El sector de Urgencias, que hace rato es uno de los puntos críticos del HNI, será ampliado a más consultorios y en un sector vacío, se construirá un sitio para la espera de los familiares.
“Tendrá todas las comodidades para que estas personas que esperan, no estén expuestas al calor y a la intemperie”, detalló el director.
Los trabajos para la ampliación y refacción del área de Urgencias podrían estar culminados entre 60 y 90 días.
Al día llegan alrededor de 200 pacientes al área de Urgencias. Los fines de semana el promedio es de 300, que deben ser atendidos.
Desde ese sector puede verse otro de los históricos dolores de cabeza del hospital. El vallado perimetral de alambre que en varias partes ha sido cortado.
La vulnerabilidad de la estructura ha permitido la facilidad para los robos que ocurren constantemente; principalmente de motocicletas de las personas que van junto a sus familiares internados.
Ferreira comenta que está previsto reforzar la seguridad perimetral con una muralla que bordee todo el predio del hospital, que abarca un total de 60 hectáreas.
Recorrido. No es el único lugar del nosocomio que está siendo intervenido. En el sector destinado a Nefrología de adultos y niños también están realizándose diversos trabajos de refacción.
En el área, los pisos están siendo renovados, las paredes intervenidas y algunos baños, que estaban en pésimas condiciones.
“Ahí, la situación era deplorable. Se tienen que cambiar paredes, el piso, el ambiente, los sanitarios en malísimas condiciones. Todo estaba feo y sin haberse arreglado siquiera en años”, describió el mismo responsable del HNI.
La situación edilicia del Hospital Nacional de Itauguá es delicada y presenta múltiples necesidades de solución con urgencia.
Con casi 34 años de existencia, es el hospital más grande del país que había sido construido con apoyo del gobierno de Francia. A los diez años, el HNI debió recibir un mantenimiento integral, lo que nunca ocurrió.
Con el tiempo, los problemas edilicios se fueron agravando y profundizándose, llegando a la situación en la que está actualmente.
Pisos rotos, equipamiento avejentado y algunos averiados, techo deteriorado, paredes huecas que sirven de refugio a alimañas son solo algunas de las múltiples falencias en infraestructura de la gigantesca mole.
Promesas. En la semana, el presidente de la República, Santiago Peña, realizó un recorrido por los diferentes sectores del hospital y constató su deterioro de décadas.
Luego de culminar su recorrido por toda la infraestructura, indicó que ordenó realizar los trabajos de mejora que iniciaron la semana pasada. A la par, anunció que dentro del mismo predio será construido un nuevo hospital.
El anuncio de Peña no estuvo exento de cuestionamiento de parte de la ciudadanía. En las redes sociales criticaron que al mandatario le haya sorprendido la situación del hospital, cuando desde hace tiempo se conoce el estado en que está.
En diferentes administraciones se ha hablado y hecho proyectos para renovar el Nacional de Itauguá; sin embargo, no avanzó más allá de la intención.