“Hemos estado en contacto con el Gobierno israelí desde temprano esta mañana y entendemos que se está llevando a cabo una investigación. Seguiremos de cerca esa investigación y presionaremos para obtener respuestas”, declaró el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
“Buscamos de manera urgente informaciones suplementarias sobre lo que pasó exactamente”, agregó.
El portavoz instó a Israel a autorizar “tantos puntos de acceso como sea posible, y permitir una distribución segura y con garantías de esta ayuda en toda la Franja de Gaza”.
Miller declaró que el incidente de la víspera muestra que la situación es ”increíblemente desesperada” en Gaza, donde la ONU advirtió de los riesgos de hambruna.
Mientras tanto, los gobiernos tanto de España como Francia –a los que se sumó Venezuela- condenaron lo sucedido.
El ministro español de Relaciones exteriores, José Manuel Albares, tachó “inaceptable” la muerte de un centenar de personas aquejadas por el hambre.
“Los bombardeos por militares israelíes contra civiles que tratan de acceder a reservas alimentarias son injustificables”, indicó un portavoz del Ministerio francés de Exteriores. AFP