RELACIONES ROTAS. El impactante operativo, sin antecedentes cercanos en el mundo, llevó al presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador a romper de inmediato relaciones diplomáticas con Ecuador. Nicaragua lo imitó este sábado.
Tanto gobiernos de izquierda de la región, como los de Brasil, Colombia, Venezuela y Chile, como de derecha como los de Argentina y Perú condenaron el asalto que culminó con detención por la fuerza de Glas, requerido por la Justicia de su país por cargos de corrupción y que se refugiaba en esa sede diplomática desde diciembre.
De su lado, la Organización de los Estados Americanos (OEA) expresó su rechazó a “cualquier acción violatoria o que ponga en riesgo la inviolabilidad de los locales de las misiones diplomáticas”, en un comunicado.
VIOLACIÓN FLAGRANTE. México denunció “una” violación flagrante al derecho internacional y a su “soberanía”. Este sábado, López Obrador pidió a sus connacionales “comportarse con mucha prudencia para evadir el acoso” en medio de la tensión diplomática.
Imágenes del viernes muestran uniformados ecuatorianos armados y con un ariete frente a la Embajada. Al menos uno de ellos escaló el enrejado que rodea el edificio para ingresar y detener a Glas, a quien México concedió asilo ese día tras haberlo refugiado durante meses.
La Convención de Viena, que garantiza la inviolabilidad del territorio de una embajada, ha sido citada por la mayoría de países que rechazaron el asedio sobre la sede de la delegación mexicana.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, calificó el viernes el asilo otorgado a Glas como “ilícito” y defendió el operativo, alegando un “abuso de las inmunidades y privilegios” concedidos a la misión diplomática. Este sábado su canciller, Gabriela Sommerfeld, acusó a México de “violar el principio fundamental de no intervención en los asuntos internos de otros estados”. La Embajada mexicana en Quito permanecía rodeada por policías este sábado y la bandera del país había sido removida de su asta en el patio, constató un fotógrafo de AFP. Según el gobierno de México los diplomáticos y sus familias regresaran al país en vuelos comerciales y con el respaldado de “embajadas amigas”.
PECULADO. Glas, vicepresidente del socialista Rafael Correa entre 2013 y 2017, tiene una orden de prisión preventiva por un presunto peculado en obras públicas contratadas luego del devastador terremoto en la costa ecuatoriana en 2016.
El político de 54 años fue trasladado este sábado a una cárcel de máxima seguridad en Guayaquil (suroeste) conocida como “La roca”, según fuentes gubernamentales.
El ex presidente Correa, exiliado en Bélgica desde 2017 y condenado en ausencia a ocho años de prisión por corrupción, dijo en X que Glas “tiene dificultades para caminar porque fue golpeado. Todo esto es una locura”.
Los gobiernos de Brasil, Venezuela, Cuba, Bolivia, Honduras Perú y Chile, entre otros, condenaron este sábado el operativo.
“Toda mi solidaridad con el presidente y amigo (Andrés Manuel) López Obrador”, afirmó en X el mandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo Gobierno condenó la acción “en los términos más firmes”. Y Argentina, gobernada por el ultraliberal Javier Milei, se sumó “a los países de la región en la condena a lo sucedido anoche en la Embajada de México en Ecuador”. Asimismo, Uruguay y Paraguay se sumaron a la condena.