El director del Hospital de Barrio Obrero, Adán Godoy, dio algunos detalles de la atención que recibió Mía, la beba de un año que falleció luego de una larga espera para ser trasladada a una cama de terapia intensiva, tras presentar complicaciones de un cuadro respiratorio.
La pequeña acudió al hospital el viernes, donde le recetaron prednisona y salbutamol. Su cuadro de salud parecía mejorar, pero se complicó y la madre tuvo que volver con su hija el sábado al mediodía.
Finalmente, la pequeña falleció el domingo tras dos paros cardiacos, uno de ellos, antes de su trasladado al Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu.
“El viernes, el examen físico que se hizo resultó aparentemente de un cuadro respiratorio que no ameritaba todo el manejo ni tampoco tenía la clínica sugerente de un cuadro más grave, como el que se manifestó 24 horas después”, explicó Godoy.
En ese sentido, manifestó que en el transcurso de esta mañana tendrá un informe completo de todos los médicos, enfermeros y paramédicos que atendieron a Mía.
🔴 Director del Hospital de Barrio Obrero niega negligencia médica tras muerte de bebé de un año y cinco meses
— Monumental AM 1080 (@AM_1080) July 9, 2025
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“Le pedí a la jefa de Urgencias que prepare ese informe. Yo lo voy a tener sobre mi escritorio apenas llegue al hospital, minutos después de esta entrevista”, sostuvo en contacto con radio Monumental 1080 AM.
Igualmente, afirmó que el servicio de Pediatría cuenta con especialistas en todas las guardias, y que los residentes atienden a los pacientes bajo la supervisión del jefe de Urgencias.
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Respecto al rápido deterioro de la salud de Mía, sostuvo que los cuadros virales tienen una evolución rápida en pocas horas. El sábado la pequeña llegó al hospital con una frecuencia respiratoria y cardiaca fuera de rango.
“Al principio, con esos criterios, se pensó en un cuadro de infección generalizada; por lo tanto, se piden las placas de tórax, se hacen los hisopados, y encontramos que era un virus que se llama metapneumovirus”, se explayó.
Sobre la denuncia de la madre que dijo que su hija comenzó a escupir sangre tras la nebulización, respondió que se trató de una hemoptisis, que se pudo haber presentado dentro del contexto del cuadro severo que tenía la beba.
“Eso les consulté a los pediatras y me explicaron que la hemoptisis puede ser dentro del contexto de un cuadro severo como tenía ella. Me comentaron que fue una tos sanguinolenta”, añadió.
Finalmente, en el Hospital Pediátrico le informaron que su hija tuvo un segundo paro y que no fue socorrida.
La mamá de la niña, Esmeralda Duarte, pidió justicia tras la muerte de su única hija.