La diputada Rocío Abed, quien lidera la bancada de Honor Colorado, solicitó el aplazamiento por 90 días del estudio del pedido de intervención a la gestión del intendente de Ñemby, Tomás Olmedo y del intendente de Ybyrarobaná (Canindeyú), César Machuca Ovelar.
La moción no prosperó, pero minutos después la sesión quedó sin cuórum y no se analizó ningún punto del orden del día.
El diputado disidente Roberto González fue uno de los más críticos al pedido que realizó su colega del cartismo. “Nos viene desgastando increíblemente eso de que tener que cajonear los pedidos de intervención”, dijo.
Aseguró que por “culpa de unos cuantos averiados, tenemos que entrar en una misma bolsa. Yo no tengo compromiso con ningún intendente sospechado” y pidió que se dé el acuerdo para conformar la comisión y se debata “a cara descubierta”.
El ex abdista Esteban Samaniego indicó que el año pasado ya fue rechazado el pedido de intervención a Ñemby, por lo tanto, se debe respetar “la decisión del pleno” y criticó que se haya enviado de vuelta el pedido.
Haciendo alusión a González, pidió que se mire la nómina de quienes estuvieron durante el debate de los pedidos de intervención a Ciudad del Este y Asunción. “Yo no me presto a la comparsa cartista. Me tiene sin cuidado eso de que no estuve en Ciudad del Este y Asunción”, respondió González a Samaniego.
Por su parte, el diputado independiente Raúl Benítez exhortó a “hacer lo que se tenga que hacer por esa Municipalidad” y en tono irónico preguntó “con quién se lleva tan bien el intendente”.
“Quiero saber con quién lo que se lleva tan bien el intendente de Ñemby, con quién lo que está saliendo”, ya que cada tanto el pedido de intervención es postergado.
También indicó que ante las críticas sobre el tema, Rocío Abed hizo un gesto de que el tema no tiene importancia. “La colega hace el gesto de que le entra por un oído y le sale por el otro cuando hablamos del intendente de Ñemby”, contó.