El detenido, Abdul Rehman, de 46 años, fue arrestado en un hotel del centro de Bangkok después que las autoridades paquistaníes advirtieran a las tailandesas que había viajado a Tailandia.
Según la investigación policial en Pakistán, Abdul Rehman forma parte de un conocido grupo de crimen organizado en ese país.
Ese grupo criminal sería el autor del incendio de una fábrica textil en Karachi (sur paquistaní) después de que el dueño de la factoría se negara a desembolsar unos 200.000 dólares.
Además de 259 víctimas mortales, el incendio provocó medio centenar de heridos y es uno de los más mortíferos de la historia.