El doctor Diego Irala, director del hospital, explicó que el nosocomio tuvo que dividirse en dos; el ingreso principal está preparado para los cuadros respiratorios y la zona izquierda, para atenciones de urgencias de otros tipos. Esta medida obedece a la necesidad de mantener el distanciamiento necesario de manera que no se produzcan contagios.
Los cambios adoptados por el director se producen en momentos en que la Gobernación de Canindeyú está en etapa final de refacción y construcción para ampliar la infraestructura del hospital, cuyo edificio ya no está dando abasto por la cantidad de pacientes que concurren, tanto para las consultas como en la urgencia. El director mostró el estricto protocolo que deben cumplir tanto los médicos como los pacientes dentro del centro asistencial en la zona destinada a cuadros respiratorios. Mostró el vestuario especial para los médicos donde deben equiparse con el traje de bioseguridad y el sanitario donde deben higienizarse para ir al sector de urgencia.
En el acceso al sector de cuadros respiratorios estarán funcionarios que recibirán a las personas que acudan a las consultas. Luego de conocer los cuadros y de completar el control de los signos vitales, deberán acudir al lavatorio para higienizarse y, finalmente, ingresar para la consulta con los médicos. Pero también se dividió la sala de consultas para casos febriles y no febriles. “El médico, luego de la evaluación, tomará la determinación de acuerdo con la gravedad de los cuadros para enviarlos a casa o mantener en sala de cuidados a los pacientes”, precisó Irala, quién logró completar el funcionamiento de más de 40 bocas de oxígeno gracias a la autogestión y la colaboración de ciudadanía y autoridades.
En el otro sector del hospital, serán atendidos los cuadros que requieran cirugía, mujeres embarazadas, politraumatizados, entre otros casos, acotó el director.
Por otro lado, el gobernador de Canindeyú, César Ramírez Caje, anunció que ya puso en marcha el mecanismo para adquirir respiradores artificiales y equipos de bioseguridad que serán distribuidos. “Seguramente vamos a dividir, 300 para la zona alta (Salto del Guairá) y 300 para la zona baja (Curuguaty)”, expresó.