De acuerdo con los registros de la Dirección de Meteorología e Hidrología, el río Paraguay descendió otros ocho centímetros en Asunción y su nivel se posicionó este sábado en 82 centímetros por debajo del cero hidrométrico (-0,82).
Se trata de la altura más baja del cauce hídrico en la zona desde 1912, año en que comenzaron a tomarse los registros en el lugar. La nueva marca ya supera por siete centímetros al pico mínimo histórico anotado en el 2021.
El jefe del Departamento de Dragado de la ANNP, Benjamín Martínez, advirtió además que el pronóstico no es alentador porque los niveles están bajando “a una razón de cinco a seis centímetros diarios”.
Según indicó en una entrevista a la agencia internacional EFE, es una tendencia que podría continuar, en vista de que no se pronostican lluvias “en ninguna parte” de la cuenca del río Paraguay.
El fenómeno podría persistir por el impacto de la sequía y los incendios registrados cerca de la frontera norte, en la zona del Pantanal brasileño, el humedal más grande del mundo, ubicado principalmente en el estado de Mato Grosso del Sur, donde nace el río Paraguay.
“Por lo menos en tres meses, sería a finales de noviembre, no se esperan periodos de lluvias importantes”, adelantó Martínez, quien añadió que, al contrario, se prevén sequías por la llegada del fenómeno de La Niña.
¿Cómo afecta esa situación a la economía?
El río Paraguay es el principal corredor de la hidrovía Paraguay-Paraná, que conecta al Atlántico la producción de Argentina, Bolivia, Brasil y Paraguay, el país que mueve cerca del 75% del comercio exterior a través del transporte fluvial.
Martínez señaló que la navegabilidad es crítica en el tramo norte del río Paraguay, pero al sur, en zonas como la de Asunción, las barcazas aún pueden transportar sus mercancías.
La situación actual implica restricciones en el calado de las embarcaciones que navegan hacia el norte, lo cual tiene consecuencias directas en el sector logístico y de transporte fluvial.
Según lo expresado meses atrás por el capitán José Aguiar, director de la Prefectura Naval de Concepción, esta reducción en la capacidad de navegación está elevando los costos de los fletes.
Este aumento en los costos de transporte fluvial repercute en diversos sectores económicos, afectando la competitividad de las empresas que dependen de la vía fluvial como medio de transporte clave para sus operaciones.