Luego de casi dos años, la Sala Penal de la Corte Suprema destrabó el caso donde están imputados por supuesto prevaricato el ministro Sindulfo Blanco y el ex ministro Víctor Manuel Núñez.
Sus colegas César Garay y Gladys Bareiro de Módica, junto con el camarista Pedro Mayor Martínez, admitieron la impugnación del camarista Emiliano Rolón, en contra de la inhibición de José Waldir Servín, también camarista.
El caso se encontraba parado desde el 5 de mayo del 2016, cuando el ahora ex juez Hugo Sosa Pasmor había impugnado la inhibición del juez Gustavo Amarilla en el proceso.
Así, el expediente pasó al Tribunal de Apelación en lo Penal, Tercera Sala, donde el camarista José Waldir Servín se apartó por amistad con el ex ministro Víctor Manuel Núñez.
Sin embargo, su colega Emiliano Rolón impugnó la inhibición de Servín, por lo que el caso pasó a la Corte, donde también hubo una cadena de inhibiciones.
La ministra Gladys Bareiro y el camarista Mayor Martínez, que integró la Corte, votaron por admitir la impugnación y que Servín quede en la causa. Indican que no se probó la amistad y frecuencia de trato entre Servín y Núñez.
Por su parte, Garay votó por rechazar la impugnación, ya que al reconocer Servín la amistad con Núñez y la familiaridad debía rechazarse la impugnación.
Con ello, ahora, Servín debe estar junto con los demás camaristas para estudiar a su vez la impugnación planteada por el ex juez Sosa Pasmor contra el apartamiento de su colega Amarilla.
Tras dos años, así la causa de Núñez y Blanco finalmente se destrabó con la resolución de la Sala Penal del Máximo Tribunal.
