“Sabiendo lo que sucedió y teniendo ideas de la fecha, hicimos la revisión de imágenes y al revisar varios contenedores, encontramos que no tenía nada, pero uno saltó, y empezamos a observar. Llamamos a especialistas y todos dijeron que esto tendría que haber sido reportado. Esto se va a corroborar”, explicó.
Ya saltó la información de un funcionario que debía haber actuado y contra él se inició un sumario.
Sin embargo, llamó la atención que el mismo director dijo que no le ven como una persona que haría eso.
También mencionó que “nadie en su sano juicio, ningún narcotraficante, se va a arriesgar a llevar tanta cantidad si no tiene asegurada a personas (cómplices)”.
500 MILLONES. La Aduana de Alemania reportó el viernes pasado que cayó una de las cargas más grandes de droga en el puerto de Hamburgo. Encontraron 10.000 kilos de cocaína escondidos entre cargas de granos que salieron de Paraguay.
Según medios alemanes, el valor de la sustancia sería de 500 millones de euros y que incluso podría alcanzar los mil de millones.
La droga estaba empaquetada en bolsas de plástico, “con varias letras de la mafia sudamericana”.
La Aduana, tras el reporte, verificó que sí se había detectado la carga acá, solo que no se hizo el reporte.
Ahora llegó hasta el Ministerio Público un pedido de investigación desde la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y el caso fue asignado a la fiscala antidrogas Fabiola Molas. También se remitió un informe preliminar sobre lo sucedido, según confirmaron.
CORRUPCIÓN. La propia ministra de la Senad, Zully Rolón, lamentó lo sucedido y habló de que esto confirma nuevamente la corrupción imperante entre los propios funcionarios.
“La lucha contra el crimen organizado es día a día. Cuesta mucho pelear contra ellos y que por un factor humano tenga que pasar esto, es lamentable para nuestro país”, sostuvo la ministra.
Dijo que indudablemente la carga provino de Bolivia y se acopió en Paraguay.
Ahora el caso ya está en campo del Ministerio Público, que es el único que puede citar responsabilidades, explicó.