Adolfo González, uno de los organizadores, dijo que destinarán lo recaudado para adquirir heparina, un anticoagulante. “Solucionamos un problema y entramos en otro problema. UME (clínica privada tercerizada) provee la heparina, que es un anticoagulante, y ahora se le está limitando porque no está cobrando bien en IPS y no puede pagar bien a sus proveedores. Estamos hablando de seis a siete meses de atraso”.
La escasez de cada día. “IPS tiene la obligación de proveer. Somos personas de clase media-baja y con esta pandemia no todos están trabajando bien”.
INVERSIÓN. Un total de 73 pacientes renales se beneficiarán con la pollada.
“La eritropoyetina en Yguazú, Argentina, es mucho más barata”, dijo González. En el país, tiene un costo de G. 380.000. El hierro sacarato está a G. 82.000, señaló. En el Brasil, el hierro tiene un costo de G. 18.000 y la eritropoyetina está a G. 70.000 en Yguazú. “De hecho que no vamos a comprar a todos, pero vamos a paliar a los más necesitados”, sostuvo González.
Tras el anuncio de la pollada publicada en los medios de comunicación, el IPS adquirió los medicamentos, pero aún no fue enviado a Ciudad del Este, según los asegurados. EM