Bolsonaro se presentó a la sede de la Policía Federal en Brasilia, pero su abogado, Fabio Wajngarten, explicó a periodistas que se apegó a “su derecho a permanecer en silencio”, por lo que fue liberado media hora después.
“Ese silencio no es solo el uso de un derecho constitucional, sino también una estrategia apoyada en el hecho de que la defensa no ha tenido acceso a todos los elementos que le están siendo imputados al ex presidente”, agregó.
8 DE ENERO. La investigación está centrada en la asonada del 8 de enero de 2023, cuando, una semana después de la toma de posesión de Lula, miles de activistas de ultraderecha asaltaron violenta y simultáneamente las sedes de los tres poderes del Estado.
Durante las averiguaciones, la Policía Federal ha encontrado serios indicios de conspiraciones anteriores a esa fecha.
El principal es el borrador de un decreto que sería dictado antes del 1 de enero de 2023, mediante el cual se impondría el “estado de sitio” y serían “intervenidas” la Corte Suprema y la justicia electoral, todo a fin de mantener a Bolsonaro en el poder. EFE