Según afirmaron, además de los bajos rendimientos, también se suma el bajo precio en el mercado internacional, que ronda los USD 370 por tonelada, mientras que durante el mismo periodo del año pasado, en el inicio de la cosecha, el costo era muy por encima, entre USD 470 y 500 por tonelada.
Señalaron a su vez que los costos de producción en el 2022 eran menores, por lo que los valores actuales no compensan toda la inversión y el esfuerzo que se vieron obligados a hacer los sojeros, aumentando las fumigaciones a causa de las intensas y abundantes lluvias registradas.
“Estamos teniendo un arranque de cosecha con rendimientos bajos relativamente, sobre todo teniendo en cuenta la elevada inversión que se ha realizado, dado el masivo ataque de malezas e insectos por las lluvias que tenemos a lo largo de la zafra actual”, dijo Orlando Gallas, jefe de Asistencia Técnica de cooperativa Colonias Unidas.
Sin embargo, existe una enorme expectativa por la soja que se sembró entre los meses de setiembre y octubre, una época ideal y recomendada de cultivo de la oleaginosa en Itapúa, por lo que la mayoría de los agricultores aprovecharon para hacer su siembra en esos meses.
“Esa soja está bien y si bien es cierto que hay un mayor costo de producción, existe mucha ilusión por una excelente cosecha de aquí a un mes estimativamente. Además, se espera que en las próximas semanas mejore el precio en el mercado internacional”, apuntó Gallas.
La misma dinámica se replica con rubros como la mandioca, el maíz, el poroto y renglones de la huerta, hortalizas y verduras en general, que registran un buen acompañamiento climático.