El domingo nuevamente quedaron varados en el aeropuerto madrileño de Barajas (Madrid) 20 paraguayos inadmitidos por las autoridades migratorias del país ibérico. De ellos, según el canciller Rubén Ramírez, la mitad ya habían obtenido plazas en vuelos de distintas aerolíneas para retornar ayer, junto con otros compatriotas que llevaban más días aguardando.
Una de las medidas anunciadas la víspera por el ministro de Relaciones Exteriores es que funcionarios consulares en San Pablo (Brasil) y en Buenos Aires (Argentina) también deberán acompañar en estos puntos a los compatriotas en tránsito que se ven obligados a regresar de España.
En los aeropuertos de Guarullos y Ezeiza, los paraguayos también tienen dificultades con la conexión aérea y muchos demoran largas horas para conseguir una localidad en algún vuelo.
Por otro lado, el canciller también aclaró que la Embajada paraguaya en España no tiene comisionada a abogada alguna para contactar con los connacionales inadmitidos en Barajas.