La Asociación Rural del Paraguay (ARP) reiteró durante el conversatorio sobre “Fiebre Aftosa y el futuro de la vacunación regional”, su compromiso con la sanidad animal, pero advirtió que “el país aún no está preparado para suspender la vacunación contra la fiebre aftosa en 2026”.
Durante una intervención ante representantes del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), y de representantes de gremios ganaderos de Argentina, Brasil y Uruguay y del sector privado paraguayo, Mario Apodaca, vicepresidente de la ARP, expuso con firmeza la postura del gremio frente al cronograma oficial que prevé suspender la vacunación contra la fiebre aftosa en 2026 y alcanzar la certificación de libre sin vacunación para 2028.
“El cronograma propuesto por Senacsa es demasiado ambicioso y poco realista”, afirmó Apodaca. Explicó que la magnitud de las tareas, la complejidad de la ejecución y el contexto sociopolítico actual hacen improbable cumplir los hitos establecidos sin asumir riesgos innecesarios.
El dirigente sostuvo que la ARP propone escenarios alternativos más prudentes, como postergar el proceso para los periodos 2027-2029 o incluso 2028-2030. La intención, según explicó el ganadero, es “consolidar consensos, fortalecer las competencias de los actores sanitarios públicos y privados, y asegurar la eficacia en cada fase del proceso”.
Apodaca enfatizó que la preocupación del sector privado radica en la premura con la que el Senacsa desea abandonar la vacunación sistemática. “Queremos llegar también a un estatus de país libre sin vacunación, pero no en 2026 ni en 2027. Necesitamos un programa más largo, fortalecer capacidades y construir confianza”, insistió.