La Policía Nacional, Aduanas, la Armada Paraguaya, entre otras instituciones, en coordinación con la Unidad Interinstitucional de Prevención y Persecución del Contrabando (UIP), aumentarán los controles que llevan adelante para frenar el ingreso de productos de contrabando.
Las principales zonas de control son Nanawa, Puerto Falcón, Vista Alegre, Remanso, Itá Enramada, Puerto Pabla, así como en los ríos Paraguay y Pilcomayo.
Al respecto, el ministro de la Unidad Interinstitucional para la Prevención, Combate y Represión al Contrabando (UIC) dijo que diariamente se incautan miles de litros de combustible de origen dudoso en la zona de Nanawa.
“Vamos a destinar más personal y recursos a este primer filtro que es Nanawa, así como también al puesto de control de Vista Alegre y en la cabecera del Puente Remanso. Entramos en una época del año en que es necesario redoblar el esfuerzo a nivel nacional”, dijo e indicó que el objetivo es lograr que los puestos de control sean impermeables para los contrabandistas.
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Uno de los productos locales más afectados por el ingreso de mercaderías de contrabando es el tomate. Los productores lamentan la inacción del Gobierno ante la situación y este jueves se instalaron frente a la Catedral de Asunción para reclamar el excesivo contrabando del producto frutihortícola, que amenaza con generar más pérdidas al sector.
Los tomateros adelantaron que irían ante varias instituciones en vista de que sobre estos entes recae el control y no se avizoran resultados.
El Senado tiene un proyecto que insta a varias instituciones, entre ellas la Policía, Aduanas, Fiscalía, a tomar medidas ante el abusivo contrabando.
En noviembre, la Armada Paraguaya destruyó puentes en Nanawa que fueron construidos de forma muy precaria y que, aparentemente, eran utilizados para el ingreso ilegal de mercaderías desde Argentina. La devaluación de la moneda argentina se traduce en un mayor ingreso de productos baratos de contrabando al Paraguay, que tiene prácticamente la mitad de sus consumidores en ciudades fronterizas.