Vera salió con alta médica de un hospital privado en la tarde de ayer, pero deberá guardar reposo por unos 20 días más, según su versión.
“La única cosa es que agradezco a Dios porque no impactó en mi hija y que no me afectó las partes vitales o zonas más peligrosas del cuerpo”, dijo ayer, en el momento en que ya estaba reposando en su casa.
La hija menor estaba con él, pero se había marchado junto a su mamá cuando el hombre recibió el impacto en la pierna izquierda, de acuerdo con lo relatado. Otras tres vecinitas también estaban en la casa, pero salieron ilesas, dijo.
Vera sostuvo que no escuchó el estampido del disparo, ya que en ese momento había explosiones de petardos por todos lados. Los familiares le trasladaron hasta un centro asistencial público, de donde fue derivado a uno privado para una cirugía, pero los médicos no lograron extraer el plomo, que quedó incrustado en el músculo, según su versión.
El caso fue denunciado ante la Subcomisaría 46 del barrio San Juan, pero recién ayer trascendió públicamente. (E. M.)