Durante la operación “se mantuvo un enfrentamiento con los detenidos que provocó que uno de ellos fuera herido”, informó el Ministerio de Interior de Uruguay en un comunicado, reproducido por medios de ese país.
La captura fue realizada en Montevideo y en el balneario de El Pinar, en el vecino departamento de Canelones.
Los detenidos estarían relacionados, según las autoridades del país, con al menos cinco muertes recientes atribuidas a ajustes de cuentas entre bandas de narcotraficantes.
Entre esos casos se encuentran el de los compatriotas Ramón Guerrero Arce, de 45 años, y su esposa, la abogada Claudia Quevedo, de 40 años, que fueron baleados dentro de su camioneta en la localidad de Solymar.
El hijo de la pareja, de siete años, resultó ileso, pero en el mismo hecho falleció una joven de 16 años que fue atropellada por la camioneta que recorrió casi un kilómetro después de los disparos. El niño fue repatriado y es atendido por profesionales tras permanecer varios días en estado de shock.
El hecho fue atribuido a un ajuste de cuentas entre organizaciones del narcotráfico. Arce “tiene antecedentes por narcotráfico en todos lados”, incluidos Paraguay y Brasil, además llevaba una suma importante de dinero, señaló entonces a la agencia AFP el comisario Hernán López.
Además de ese crimen, a los cuatro detenidos este jueves se les considera también sospechosos del asesinato de un hombre y de un bebé de 15 meses, ocurrido a fines del mes de enero.