EFE
Los números son aún mayores debido a que los casos de feminicidio no son debidamente contabilizados en todas las regiones de Brasil, de acuerdo con G1, que consultó las estadísticas de los organismos de seguridad pública de los 27 estados del país para elaborar su informe.
Según el estudio, de los 4.473 homicidios de mujeres el año pasado, 946 fueron tipificados como feminicidio, es decir, cuando la mujer fue asesinada específicamente por odio a su condición de género. El número de feminicidios también aumentó en 2017 con respecto a los 812 contabilizados en 2016.
En 2015, cuando comenzó a regir la ley que tipifica el feminicidio y eleva las penas para sus autores, fueron registrados 492 casos. En la época, sin embargo, tan solo 16 de los 27 estados del país contabilizaban estos casos. El año pasado aún había tres estados que no registraban los feminicidios en sus estadísticas.
Para Juliana Martins, investigadora del Foro Brasileño de Seguridad Pública, esas cifras confirman a Brasil como el séptimo más violento para las mujeres de entre los 83 que son analizados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).