Con el empate, el Tricolor asegura su participación en la Copa Sudamericana del próximo año y se baja definitivamente de la lucha para la Libertadores, porque a falta de dos fechas ya no le puede dar alcance a Cerro Porteño en el acumulativo.
Por el lado de Danzarín, dejó escapar gran parte de sus chances de seguir peleando por entrar a la Sudamericana.
Apático. En lo que respecta al partido en la Visera, los protagonistas por momentos intentaron, pusieron empeño y entusiasmo, pero no lo suficiente para romper el cero.
A Nacional le costó llegar con claridad hasta el arco rival, ante un rival disciplinado, bien parado y sobre todo concentrado en el juego.
La chance más clara para el Tricolor en la primera parte, fue un disparo de Fredy Bareiro que reventó en el pecho de Acosta, portero visitante.
Sol no tuvo fuerza arriba, sin el apoyo de los volantes, Domínguez se pasó más protestando que jugando y Vázquez fue absorbido por la marca de los defensores rivales.
Parecido. En la segunda parte, el trámite del juego no varió mucho, los técnicos recurrieron a sus jugadores de los bancos para tratar de mejorar en la producción futbolística, pero los que ingresaron tampoco hicieron mucho.
Incluso, Jacquet, técnico de Sol, volvió a sacar a Mazacotte, quien había ingresado en el arranque de la complementaria, porque el jugador no logró meterse en el juego que pretendía el adiestrador.
Chances. La visita tuvo su posibilidad con una atropellada de Vázquez y en un remate de Frutos, en ambas ocasiones los hicieron de manera deficiente y la pelota terminó en manos de Don.
En el equipo local no hubo jugada en conjunto, ni tampoco aparecieron las individuales. Benítez intentó algunos desbordes, pero sin mucho éxito.
En los tramos finales del juego, el equipo de Morínigo fue muy repetitivo con los centros frontales, sobre todo después del ingreso de Santa Cruz, pero tampoco apareció el cabezazo salvador.
Antes del final, Nacional tuvo una más; en el área Santa Cruz cedió el balón a Velázquez, sin marca, pero su remate se perdió sobre el travesaño. El empate fue justo, ninguno de los equipos mereció más.