CIUDAD DEL ESTE
Un hombre ingresó caminando al Hospital Distrital de Minga Guazú hace dos semanas y ahora está internado en una sala de terapia intensiva de un centro asistencial privado, por complicaciones de su salud. La Justicia negó ayer una medida cautelar a sus familiares, quienes recurrieron a un recurso de amparo con intenciones de ingresarlo al Hospital Regional, por insolvencia. Fue porque no había camas libres en el hospital público. En Seme le informan que en el país no hay camas disponibles.
Se trata de Alberto Velázquez, cuyos familiares recurrieron a un recurso de amparo para solicitar su internación en el Hospital Regional, pero el juez Amílcar Marecos rechazó la medida cautelar, porque no hay cama en el hospital público.
“Rechacé la medida cautelar porque no hay cama. Me constituí al hospital, me contaron que las 4 camas estaban ocupadísimas y estaban 2 a 3 personas con respiración manual, esperando que haya lugar, y este paciente, que presentó el amparo, ya estaba asistido en SPU”, afirmó el juez al dar su versión.
“Por protocolo no se puede quitar al que está esperando, para traer a otro que ya estaba internado”, argumentó el magistrado.
“Mi padre entró caminando por artritis séptica en el Hospital Distrital de Minga Guazú, luego se contagió de neumonía y le diagnosticaron diabetes también. El sábado a la noche apenas estaba respirando y el único que pudimos conseguir de urgencias es el del Servicio Privado de Urgencias”, afirmó su hija, Nancy Elizabeth Velázquez.
La familia logró juntar 5 millones y medio de guaraníes para poder ingresar al paciente en el servicio privado. El alto costo les impulsó a los familiares a recurrir a la Defensoría Pública. De entrada, entregaron G. 5,5 millones, pero por un día de internación tuvieron que abonar más G. 2,2 millones, siempre según la versión de la hija.