Son tres viviendas afectadas gravemente, que se teme se derrumben en caso de que vuelva a darse una tormenta o lluvias intensas.
El problema principal es que las casas están ubicadas a la vera del arroyo Ferreira, cuyo cauce crece con cada lluvia intensa.
Las viviendas más afectadas están ubicadas sobre las calles Pozo Favorito y Mayor Gardel, pero también otras afectadas están ubicadas sobre Teniente Garay, Padre Casanello y Obispo Maíz.
Según relató Viviana Rojas, una de las afectadas, a NoticiasPy, en el lugar hay obras inconclusas que agravan la situación. Son intentos de muros de contención que nunca terminaron de construirse.
Rojas comentó que las casas van perdiendo zonas por partes. “En la casa de una vecina se desmembró su cocina, que estaba al fondo, mientras que en otras viviendas el agua ya inundó el patio y sube lentamente”, refirió.
Américo Arias, otro vecino de la zona, agregó que esta situación no es nueva, y que él ya lo vive hace 40 años.
Recordó las promesas de varios políticos, pero que finalmente no hicieron nada al respecto. Lamentó que hasta la fecha desconocen a qué institución acudir.
Así también, teme por la salud de los vecinos, ya que las aguas cloacales suben y el lugar se vuelve cada vez menos saludable para los que lo habitan en la zona.