Todas las operadoras telefónicas del país comercializarán el dispositivo y el precio oscilará entre 850 y 1.000 dólares, dependiendo del modelo y el tipo de plan que escoja el usuario.
El Galaxy S8 posee una pantalla de 5,8 pulgadas, mientras que el S8+ ostenta 6,2 pulgadas. De hecho, la gigante asiática apuesta al mayor confort que puedan proporcionar sus displays y es por eso que incorporó la función infinity sin marcos, con lo que se elimina el botón físico de home y pasa a ser invisible. Así, se busca aprovechar más las pantallas. Se podrán desbloquear con el iris del ojo.
Ambos aparatos cuentan además con resistencia al agua y al polvo (IP68), soporte MicroSD de hasta 256 GB, pantalla siempre activa y la capacidad de cargas rápidas e inalámbricas. En lo que se refiere a las cámaras, la delantera es de 8 megapíxeles (MP) autofocus y la trasera Dual Pixel de 12 MP.
Las baterías (3.000 mAh en el S8 y 3.500 mAh en el S8+) prometen ser más duraderas y resistentes, incluso a la combustión.