“Es malo no cambiar, pero también es malo cambiar de mala manera”, expresó al recordar que en las próximas elecciones no regirá la ley de financiamiento político.
“El Paraguay tiene la mitad de su economía en forma informal, ilegal y criminal, entonces, ¿quién va a controlar a quién?”, se preguntó.
Según Ferreiro, lo primero que hay que hacer es “blanquear al controlador y no al controlado, porque el controlador utiliza después su poder de control para sacar beneficios indebidos y joderle al contrario”.
Indicó que todo debe ir dentro de una reforma global de sistema político electoral y de partidos que, según su parecer, se hicieron con mucha deficiencia a consecuencia de que está mal en la Constitución Nacional.
El legislador sostiene que no hay ningún elemento que permita confiar en ninguna institución de la República.
Persecución. Aseguró que todo se maneja desde el poder, la arbitrariedad, los privilegios y de los intereses creados por aquellos que están al frente, y que se le aplica la ley al adversario, con arbitrariedad, para la persecución, la marginación y beneficio propio.
El senador destacó que “navegamos por aguas tan descompuestas que nos califican entre los últimos 180 países con seguridad jurídica e institucional”.