En una carta abierta para Donald Trump, nuevo presidente de los Estado Unidos, en donde pide ayuda para los niños sirios que sufren por los ataques que abundan en su país.
Bana es una niña que se hizo conocida a través de los twitts que lanzó durante la tragedia de Aleppo. La misma solo tiene siete años y fue evacuada en diciembre del año pasado de Aleppo hacia Turquía.
La frase que engloba el pedido en la carta es “tiene que hacer algo por los niños de Siria, porque son semejantes a sus niños y merecen vivir en paz como ustedes (...) Soy uno de los niños sirios que han sufrido la guerra en Siria”, manifiesta en el escrito.
En ella, Dana explica a Trump que su escuela de Aleppo fue destruida por los bombardeos y que amigos suyos murieron a causa del ataque.
“Ahora en Turquía, puedo salir a divertirme. Puedo ir al colegio aunque todavía no lo he hecho. Por eso, la paz es importante para todo el mundo, incluso para usted (...) Pero millones de niños sirios no están como yo en este momento y siguen sufriendo en diferentes regiones de Siria (...) Tiene que hacer algo por los niños de Siria, porque son semejantes a sus niños y merecen vivir en paz como ustedes”, afirma la niña.
Entre las más de 300.000 personas muertas durante la guerra que arrasa Siria desde hace seis años, hay al menos 15.000 niños.
Bana se convirtió en un ícono de las redes sociales tuiteando con su madre el infierno diario en Alepo. Así relató momentos conmocionantes de la vida en la ciudad asediada que el régimen del presidente sirio Bashar Al Asad denunció como propaganda. La carta fue difundida por la madre de Bana quien acercó a la BBC para su difusión.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, la recibió el 21 de diciembre con su familia tras haber sido evacuados.
Turquía, que junto a Rusia e Irán acaba de apadrinar un acuerdo para consolidar el alto el fuego en Siria al término de las negociaciones de Astaná, acoge en su territorio a casi tres millones de refugiados sirios.
La nueva administración estadounidense de Donald Trump se declaró abierta a una cooperación con Rusia contra el ISIS en Siria, pero no tiene intenciones de recibir a los refugiados.