La Unión Nacional de Centros de Estudiantes del Paraguay (Unepy) se queja de las mentiras, incompetencia y falta de voluntad para impulsar una educación de calidad en el país.
“La calidad de la educación pública es mala no porque no hay dinero, no porque los docentes son malos, sino porque a los gobernantes de turno les importa un bledo”, critican en un reporte de prensa.
Recuerdan que los kits escolares que deben ser entregados al inicio del año escolar se completan recién en mayo, en tanto que los libros llegan a mediados de año y en cantidad insuficiente. A esto se suma que los colegios que sufrieron derrumbes o tienen problemas de infraestructura no están siendo reparados.
Los estudiantes repudian que los compromisos asumidos ya en el 2015 con el presidente Horacio Cartes y la ministra de Educación de Entonces, Marta Lafuente, no se cumplan. Incluso indican que la actual gestión de Enrique Riera es peor que su antecesor, quien renunció tras movilizaciones a nivel país.
Uno de los compromisos era la entrega de tres libros básicos a los alumnos de educación media, pero no se cumple a cabalidad. “Un libro que está secuestrado en la biblioteca no sirve para nada”, expresa el pronunciamiento del gremio estudiantil.
De esta manera, los jóvenes buscan tener las mismas oportunidades que un estudiante de un colegio privado como lo garantiza la Constitución Nacional.
Estas quejas coinciden con la toma de dos colegios, San José de Limpio y Saturio Ríos de San Lorenzo. En el primero los estudiantes piden la rápida construcción de aulas para retornar a la institución, pues hasta el momento permanecen refugiados en el Comando Logístico de su ciudad, en tanto que en el segundo caso piden que se tomen medidas contra 13 docentes por mal desempeño de sus funciones y piden que la directora sea la política liberal Alba Invernizzi.