Explicó que según el grado de lesión, las mismas pueden curarse en un par de días sin mayores secuelas, pero en casos más graves pueden dejar cicatrices en la córnea, las cuales disminuirán definitivamente la visión en algún grado.
Ante los casos de molestias, al estar en contacto con el producto, el doctor recomienda lavar la cara con abundante agua y con los ojos bien abiertos. También utilizar lágrimas artificiales exclusivamente para intentar lavar y lubricar la superficie hasta consultar con un especialista. Resaltó que quienes usen lentes de contacto deben retirarse inmediatamente los anteojos y evitar automedicarse.